martes, 14 de octubre de 2014

Sobre mi TRALsegar y el fin como un nuevo inicio

"Las aguas fluyen ininterrumpidamente y llegan a su meta: 
la imagen del abismo repetido. 
El hombre superior camina a través de la virtud y llega a dedicarse a la enseñanza.
El hombre superior sigue el ejemplo del agua, como una norma total de conducta sólida y establecida. 
También el enseñar a los demás depende de la consistencia y de la reiteración: sólo por la repetición el alumno aprende el material que se le enseña”
Hexagrama Kan, Libro de Las Mutaciones

La focalización:

 
Volviendo sobre el camino recorrido, me gusta observar la manera como TRAL significó un proceso de focalización de prioridades sobre mi qué-hacer académico y laboral en un momento crucial en el que estaba iniciando mi vida laboral en UniValle. Llegó como anillo al dedo! Y eso lo pienso por la oportunidad reflexiva que me permitió, así como por los desafíos más prospectivos que fui construyendo al final. 


En este sentido, encuentro en TRAL un proceso de focalización sobre las prioridades de mi hacer académico-profesional, con la expectativa de construir un espacio de aprendizaje crítico, des-centralizado, con una producción constante de nuevo conocimiento, inspirado en prácticas creativas y colaborativas.

El TRALsegar:

Al revisar las diferentes “entradas” en TRAL, veo cómo poco a poco voy afianzándome en el nuevo espacio laboral de UniValle.

Al principio, tímidamente me leo anunciando mi llegada y haciendo explícitas mis intenciones, amplias y flexibles, pero sobre todo las experiencias que traigo como una mochila llena de herramientas y aprendizajes.



Luego, leo la ilusión con la que dejo volar mis expectativas, dando rienda a los sueños sobre el espacio de aprendizaje que quiero construir en mi Área; comienzo a entender también cómo UniValle es un universo que muchas potencialidades que debo poder tejer en mi propósito.



Finalmente, me leo afinando prácticas y acciones concretas que me permitirán moldear mi espacio personal de aprendizaje en AGA hacia lo que descubro, como parte de este TRALsegar, a manera de una Comunidad de Aprendizaje e Investigación. Entiendo que el AGA es mi lugar de expansión, sin que necesariamente implique una centralización; es más bien mi origen/espiral.

El desafío vigente de pensar con otros:

Una vez alcanzado el objetivo de hacer un plan de fortalecimiento de AGA como CoA/I, el desafío más claro que encuentro es cómo convertir ese plan, esa visión y ese proceso en una misión colectiva desde mi Área. Entiendo que crezco y amplío mi red personal de aprendizaje toda vez que logro trazar unas metas para fortalecer mi acción y relación con nodos (personas e instituciones) que potencialmente me permitirán crecer en investigación. Sin embargo, si el desafío es des-centralizar mi red, entiendo que esto pasa por colectivizar mi visión y mi estrategia y hacerla parte de una misión grupal, donde el “mutuamente” domine. Encuentro que la actual construcción del Plan de Desarrollo del AGA es un momento óptimo para este ejercicio; este es, pues, mi punto de llegada y nuevo punto de partida.


[Como metáfora de este camino TRAL, ayer completé mí 35 semana de embarazo. Pronto daré a luz a mi hijo Samuel, y sé que este momento será a la vez la culminación de mi gestación y el claro inicio de una nueva vida de mamá, donde todos los caminos aún están por crearse.]









martes, 7 de octubre de 2014

Creando el lugar de cada cosa (o “las cuentas claras y el chocolate espeso”)

Me gusta la oportunidad de recorrer mis pasos de forma retrospectiva. De revisar lo construido y de ubicar cada cosa en su lugar, según la experiencia adquirida. En primer lugar, la re-reflexión, o revisión de las creaciones previas de soluciones, me ha llevado a hacer dos cambios importantes en el plan (ver gráfica abajo):
(i)                  Las actividades de Reunión, sabiendo que tienen una dinámica supremamente enraizada en mi Comunidad de Aprendizaje e Investigación (AGA), no requieren mayor esfuerzo ni planeación. En este sentido, su prioridad en el plan de acción de fortalecimiento del AGA es realmente secundaria. Por esto su puntuación en el plan es media.
(ii)                Las Conversaciones abiertas, al reconocer que ocurren de forma espontánea y que dan lugar a conocimientos e información menos estructurada, que conduce de forma menos efectiva a productos (de investigación) específicos, no requieren tampoco ser priorizadas; de hecho, parece contra natura planear conversaciones cuya naturaleza es precisamente la espontaneidad. Por esta razón, su puntuación en la araña redujo drásticamente comparada con la puntuación planeada inicialmente.



En términos de la actividad Tral 8, me parece importante reflexionar sobre el hecho de que las actividades que se proponen en el mapa mental son fundamentalmente de carácter tecnológico y están encaminadas a construir redes o grupos virtuales (tipo Tral). Si bien en la guía del ejercicio este sesgo se hizo explícito y se le dijo al lector que cada quien es libre de variar su mapa según su interés, creo que el ejercicio se enriquecería si incluyera un mapa mental que tuviera como base la creación de otro tipo de Comunidad de Aprendizaje o Comunidad de Práctica. Por ejemplo, recomendaría incluir un mapa mental alternativo que fuese inspiración para construir una CoA/I. Tal vez muchos de quienes estamos en Tral usamos este curso como una herramienta para fortalecer nuestras prácticas cara-a-cara (y no solo virtuales), así que el curso ganaría versatilidad si ofreciera más ideas y opciones en sentidos no (solo) virtuales.


Tejiendo Redes de Aprendizaje en Línea

Prospectiva de actividades para AGA como CoA/I

La idea expuesta en el video sobre la sabiduría práctica como la capacidad de construir soluciones es inspiradora. En particular, me remite a la reflexión sobre soluciones enmarcadas en la sencillez. Apelando al dicho de que “más no es mejor” o “no por más madrugar amanece dos veces”, pienso en la importancia de que las actividades tendientes a fortalecer AGA como CoA/I mantengan un principio de economía práctica. Algo como lo que William de Ockham, basado precisamente en Aristóteles, diría con respecto a la mayor factibilidad de una teoría de ser correcta siempre que sea más simple.


En el contexto de crear soluciones a los desafíos identificados para fortalecer el AGA como una CoA/I, pienso que un modelo que busque la sencillez o, en otras palabras, que parta de la economía de actividades, tendría más opciones de prosperar. En este sentido, identifico como una ventaja del diagrama construido como “Orientaciones” que las sub-actividades se crucen. Por ejemplo, encuentro que las actividades de Acceso a expertos, Relaciones y Cultivar comunidad están íntimamente relacionadas, y eso lo veo como una solución sencilla y articulada a un desafío del AGA. Ver el diagrama en las siguientes imágenes para observar la coincidencia de actividades. 

Parte superior del gráfico.

Parte inferior del gráfico.

viernes, 26 de septiembre de 2014

Contar con el/la otro/a como un/a verdadero/a otro/a



A propósito de la "mutualidad" que implican las CoA/I, aquí una inspiración un poco menos conceptual y más desde el sentir:

“Compañera 
usted sabe puede contar conmigo no hasta dos o hasta diez sino contar conmigo 
si alguna vez advierte que la miro a los ojos y una veta de amor reconoce en los míos no alerte sus fusiles ni piense qué delirio a pesar de la veta o tal vez porque existe usted puede contar conmigo 
si otras veces me encuentra huraño sin motivo no piense qué flojera igual puede contar conmigo 
pero hagamos un trato yo quisiera contar con usted 
es tan lindo saber que usted existe uno se siente vivo y cuando digo esto quiero decir contar aunque sea hasta dos aunque sea hasta cinco no ya para que acuda presurosa en mi auxilio sino para saber a ciencia cierta que usted sabe que puede contar conmigo.”




Hagamos un trato - Poema de Mario Benedetti. Disponible en: http://www.poemas-del-alma.com/hagamos-un-trato.htm#ixzz3ELqhUDZB

Objetivos para fortalecer(me-en) AGA como una CoA/I

Quisiera usar el término de Comunidad de Aprendizaje (CoA), más que el de Comunidad de Práctica (CoP), pues encuentro que los principios más estructurados de CoA coinciden de manera más apropiada con las expectativas que tengo de fortalecer la investigación en mi entorno inmediato de aprendizaje. 
Para ser más precisa, usaré un nuevo término CoA/I, el cual hace referencia a una comunidad de aprendizaje (CoA) cuyo interés y práctica central gira en torno a la investigación (I).

El Área de Gestión Ambiental es ese entorno inmediato, y este ejercicio reflexivo y proyectivo lo oriento, entonces, hacia el fortalecimiento del AGA en su práctica investigativa. Con este objetivo general, ubico dos objetivos específicos en este taller:
  • ·      Reflexionar sobre mi escala de valor en torno a una CoA/I.
  • ·      Definir desafíos claves para convertir el AGA en una CoA/I que responda a mis expectativas.


Desarrollando el diagrama de araña sugerido, obtengo la siguiente figura:



Reflexión:
En general, encuentro un balance en todas las prácticas de lo que sería una CoA ideal. Las prácticas más fuertes deberían estar orientadas hacia los proyectos, las relaciones y el contexto. Identifico aquí un efecto lógico entre A. producir conocimiento a través de proyectos, B. producirlo con la cooperación de una red de relaciones (no necesariamente con “expertos) y C. impactar el contexto donde ese conocimiento se produce.
Interesante me resulta, en consecuencia, reconocer que los expertos no son una prioridad en mis prácticas de comunidad y que, por otro lado, las reuniones son necesarias aunque no tan importantes como los proyectos mismos. Esto me habla de la priorización de la acción sobre la base de una coordinación necesaria pero mínima.
En el balance entre lo ideal y lo actual, encuentro que el principal desafío consiste, además de reforzar todas las prácticas, en encontrar un equilibrio en la realización de reuniones. Básicamente el estado actual habla de muchas reuniones y poca investigación, obligando a un cambio en esta práctica para llegar a un estado más ideal de mi CoA/I.   


Tejiendo Redes de Aprendizaje en Línea

jueves, 25 de septiembre de 2014

Las comunidades y la investigación

A continuación presento una breve reflexión sobre dos de las lecturas sugeridas en el nivel 7 de TRAL, textos que he explorado con las gafas (o con el interés) de reflexionar sobre las oportunidades de crecimiento de mi APA en investigación.

En las Comunidades de Prácticas (CoP) caracterizadas por Lave & Wenger (1991), la informalidad parece ser un elemento central. Si bien se menciona la posibilidad de formalizar las prácticas, lo cierto es que la emergencia, como un concepto central de las CoP, parece dar amplia cabida a la flexibilidad y espontaneidad. Sin que ello constituya una en sí mismo desventaja, la plasticidad y el carácter líquido de estas comunidades, como las llamaría el sociólogo Zygmunt Bauman, hacen difícil ver cómo conllevan a productos comunes concretos como los que son necesarios en proyectos de investigación y en otras prácticas de aprendizaje.  

En el documento de Galvis & Leal (2008) se le da mucha más estructura a la comunidad, y por eso puede decirse que es más que un grupo con una base común de intereses. Tal vez la principal característica de estas Comunidades de Aprendizaje (CoA) puede nombrarse como un “mutuamente”. “Mutuamente” se refiere a (i) una aceptación colectiva de reglas de juego, a (ii) una participación INTER-relacional que contribuye al objetivo o interés común, y a (iii) una INTER-acción que consiste en un permanente dar y un constante aprovechamiento de las acciones de los otros. Es allí, en esta mutualidad, donde surge la confianza, y es desde esa confianza que puede transitarse hacia CoAs que desarrollan proyectos de investigación. 

Balance y huellas en retrospectiva

Al hablar de un lenguaje TRAL, lo primero que se me viene a la mente es “redes y ambiente personal de aprendizaje”. Asumo que esta es la mayor impronta semántica y conceptual de TRAL. La importancia que esa huella tiene consiste, desde mi punto de vista, en su potencial transformador de mis prácticas de conocimiento. Ejemplos muy sencillos ilustran la manera en que la perspectiva TRAL ha influenciado mi pensar en redes y ambientes de aprendizaje.

Actualmente nos encontramos desarrollando colectivamente el Plan de Desarrollo del Área de Gestión Ambiental, que es la unidad académica de UniValle a la cual me encuentro vinculada. El el diseño de la metodología para la construcción de dicho Plan, era libertad de cada quien pensar en los elementos clave a tener en cuenta. En mi caso, yo debía organizar la dinámica colectiva para construir el Plan de Desarrollo correspondiente al componente de investigación y fue mi decisión basar la dinámica e información resultante en las redes de investigación pasadas, presentes y futuras de cada docente. Con este mapa multi-red, busqué potenciales articuladores entre contactos, dinámicas de relación y temas de investigación. Este es un claro ejemplo de cómo TRAL, su lenguaje y conceptualización, ha marcado y transformado mi forma de ver la construcción del conocimiento.


Reflexionando sobre esta experiencia concreta, puedo decir que el diseño de TRAL me ha permitido interiorizar una forma novedosa de reflexionar y construir conocimiento. A esta interiorización de los conceptos de TRAL le había llamado anteriormente enganche, y creo que este tipo de “enganches” puedo verlos en otros TRALEROS que afirman seguir interesados en preguntas que los talleres formularon, así como en otros compañeros/as de UniValle que también han cursado el camino TRAL.